.jpg)
.jpg)
La controversia que rodea al proyecto de ley sobre el divorcio, parece conceder a esta película una actualidad que tampoco debe sobrevalorarse. Los hechos caricaturizados en una comedia americana de corte costumbrista, difícilmente resultan equiparables a nuestra realidad. Uno de los personajes de la película, abogado especialmente en divorcios y separaciones matrimoniales, afirma: <el divorcio en la industria norteamericana más próspera>. En una sociedad basada en el consumo, el divorcio abre sin duda la esperanza de nuevas transacciones comerciales. sin embargo <La última pareja>, como película que intenta satirizar ciertos aspectos de un país donde el divorcio ya no es novedad, afronta en clave de comedia la crisis de la propia institución matrimonial. En este sentido, la película adopta una postura decididamente conservadora que acaso deba interpretarse como reacción ante la frivolidad de algunos comportamientos que se ampara en la moderna liberalidad de costumbres. ¿Está el matrimonio pasado de moda?. La película intenta contestar esta pregunta, pero lo hace con argumentaciones tan divertidas como parciales. El arquitecto Jeff Thomson (George Segal) y su esposa Mary (Natalie Wood) componen el típico matrimonio modelo. Acostumbran a pasar los fines de semana en compañía de otros matrimonios, también felices en aparición. Pero estas idílicas reuniones campestres, empiezan a registrar bajas; los matrimonios amigos se separan o divorcian, así que la protagonista se convierte realmente en <la última pareja> de su círculo social. Son casi un producto anacrónico para estos amigos que, de la noche a la mañana, han recobrado la <libertad>, pueden vivir su vida sin ataduras de ninguna clase y recuperar el tiempo perdido. Semejante fiebre divorcista terminará por hacer mella en Jeff y Mary, que no pueden permanecer ajenos viendo tanto naufragio matrimonial, y se sienten obligados a cuestionar su aparente felicidad conyugal. De Gilbert Cates, pudimos ver hace varios meses <Promesa de amor>, un melodrama de aquí te espero. En esta ocasión cambia de género y dirige con cierta impersonalidad una comedia que se apoya en el juego de sus intérpretes, y sobre todo en la ingeniosidad de sus diálogos, dos consumados comediantes como George Segal y Natalie Wood encuentran un guión que les permite lucir sus adora las histriónicas. Sin olvidar la eficacia, en cometidos secundarios, de Richard Benjamin o el gordo Don de Luise. <La última pareja> es una película en la que subyace una gran carga moralista. Pero su notaria parcialidad -la epidemia divorcista reflejada en la película no distingue entre crisis matrimoniales auténticas y frivolidad de costumbres- impide su adopción como punto de referencia en cualquier discusión a favor del divorcio. Se trata en suma de una comedia que se visiona con la sonrisa en los labios gracias al trabajo de sus intérpretes y a las situaciones desarrolladas con habilidad por un guionista de indudable talento. Ll. BONET MOJICA
00000000000000000000000000000000000000000
Sé feliz en tu relación
Natalie Wood es más conocida por su papel de niña en "Milagro en la calle 34". Y no olvides la película de la revolución sexual, "Bob & Carol & Ted & Alice". En esta película, es bastante similar, solo que con una moraleja que la respalda. George Segal y Natalie Wood interpretan a Jeff y Mari Thompson, un matrimonio con tres hijos. Tienen amigos que están casados. De repente, todos los que conocían se han separado o divorciado. Y comenzaron a cuestionar su propia relación. Su matrimonio se pone a prueba cuando la amiga de María, Barbara (Valerie Harper), llega a la ciudad y se le acerca a Jeff. Él, que sabe que debe ser muy fiel a su esposa, la ignora. Hasta que una noche, lo hace. Después de contraer una ETS, Mari decide hacer lo mismo. Lo único que pueden hacer para volver a estar juntos es con la fiesta de cumpleaños de un amigo. Esta película tiene un gran elenco y escenas geniales. Dom Deluise estuvo genial. Y no podía imaginarme a Valerie Harper como rubia. Sin embargo, se veía genial. Y mi escena favorita fue la de las sorpresas de cumpleaños. Llevar a Jeff a su lugar de reunión y mostrarle sus genitales cuando no se dio cuenta de la sospecha del abrigo de piel. Es una película muy buena, disfruté cada momento.
ooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooo
Véala por Natalie Wood
No, no es una película muy buena. Sin embargo, es divertida de ver, aunque más no sea por la simple razón de reírse de la supuesta actitud "moderna" de toda la película, cuando en realidad es tan convencional como un episodio de Love Boat. La escena de la fiesta al final con las prostitutas, los swingers y la versión disco de "Cantando bajo la lluvia" es divertidísima.
Pero la razón para ver esta película es por Natalie Wood, que le da corazón a la película. Ella es absolutamente maravillosa en ella. Era una actriz estupenda, incluso en algo tan frívolo como esto... divertida, hermosa, ¡una actriz de clase hasta el final! Ninguna de las actrices de hoy se acerca a su clase de estrellato. Echo de menos a grandes actrices como Natalie Wood.
ooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooo
Comedia azulada con una moraleja subyacente... la presión de grupo de los adultos conduce a actividades extramatrimoniales
George Segal y Natalie Wood representan a un matrimonio de clase alta en Los Ángeles que descubre que son los últimos de una especie en extinción: todos los hombres y mujeres dentro de su círculo de amigos están separados de sus cónyuges, divorciados o en busca de dinero. El guión, inteligente y divertido en ocasiones, de John Herman Shaner no adopta una postura justa sobre los sucesos sensuales, aunque Shaner se apresura a señalar los peligros de la mediana edad (impotencia, enfermedades venéreas, pareja insatisfecha). Gilbert Cates la dirige como si fuera una serie de televisión para adultos, aunque se consigue transmitir algo del mordacidad que se pretendía (con un toque de humor adulto e ingenioso) y el reparto es bueno (aunque hubiera sido una mejora que Dom DeLuise no fuera tan cursi. Wood, en particular, muestra un gran crecimiento desde su no muy diferente coqueteo con las inhibiciones sexuales en "Bob & Carol & Ted & Alice" de 1969; aquí es sorprendentemente relajada y física, y trabaja cómodamente con Segal, aunque el propio George está bastante agotado. Con la revolución sexual de los años 70 desapareciendo rápidamente tras su estreno, la película no tenía ninguna posibilidad de triunfar en taquilla, pero partes de ella son muy divertidas y mordaces y han resistido bien.
ooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooo
Una gran comedia de finales de los setenta
Una de las películas más subestimadas de finales de los setenta. Buena dirección de Gilbert Cates en un guión ingenioso, los actores son excelentes. La química entre Wood y Segal es un regalo del cielo. Las escenas entre los personajes principales son conmovedoras. Los actores secundarios también son agradables, especialmente Dom DeLuise y Marilyn Sokol. Una película para descubrir.
ooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooo
No está mal
Jeff (George Segal) y Mari (Natalie Wood) Thompson son una pareja felizmente casada... pero todas las otras parejas casadas que conocen están divorciadas o separadas y parecen felices estando solteras. Los lleva a empezar a cuestionar su propio matrimonio y si realmente son felices.
Solo vi esta película por Natalie Wood. Esta película no fue un éxito (recuerdo que fue un fracaso total en 1980) y fue la penúltima película de Wood en llegar a los cines. No es tan mala como he oído, pero tampoco es una gran película. Tiene MUCHAS conversaciones sobre sexo, chistes y saltos en la cama (esto fue antes del SIDA), pero sorprendentemente no hay desnudos hasta el final. De hecho, se parece mucho a una comedia de situación para adultos. El guión en realidad no es malo: captura perfectamente los estilos, el lenguaje y la actitud de finales de los años 70 hacia el sexo y el matrimonio. Pero, al final, se evade y se vuelve MUY convencional. Bastante típico de una comedia sexual de Hollywood. El reparto es muy atractivo: Segal sobreactúa, pero de una forma entrañable, Wood es simplemente genial y luce fantástica (¡es sorprendente oírla decir palabrotas!) y Valerie Harper es excelente como una mujer sexualmente liberada. El mayor problema aquí es que nunca es realmente gracioso. Es solo levemente divertido en el mejor de los casos. Aún así, si te interesa la década de 1970 y su visión del sexo, probablemente te gustará esto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario